jueves, 23 de diciembre de 2010

Feliz Navidad.

Es muy tarde, son las dos de la mañana. Para la cena ya tengo la ropa elegida, y aún sabiendo que me voy a poner muy nerviosa, porque ante todo mi fobia social se apodera de mí, mañana lo quiero disfrutar como pueda y cuanto pueda. Y además, quiero ser positiva, así que voy a intentar por todos los medios que me vaya bien la cena y no sentirme mal, que es un día para estar en familia y estar alegre. Para mi celebración, me gustaría dejar aquí un vídeo que grabe hace poquito tiempo, tiene muchos fallos, pero es lo que había grabado hasta el momento. Para quienes les guste la canción de Rosana tan conocida: "si tu no estas aquí", ya que ella canta muy bien y sus canciones son muy especiales. Cantar me hace sentirme bien, fuera de los malos pensamientos que tiene mi cabeza. De echo, creo que este año me porté lo suficiente mente bien como para merecer algún que otro regalo, si, si, si, ¡¡¡una guitarra para mí!!! En estos doce meses, han sido buenos, y a la vez malos, pero me siento orgullosa también de haber fortalecido la rama de mi vida. Así que, no hay mal que por bien no venga. Pues bueno, como dije antes, aquí dejo el vídeo, para quien pasa la Noche Buena solo por alguna razón, animo. Que tengáis todos una Feliz Navidad, a disfrutarla como ninguna otra. Saludos.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Mira la vida, mira las flores que nos regala, aunque algunas las arranque con dolor.

Una falda con medias muy finas, una blusa blanca sin ningún manchón apenas, no llevo abrigo, pero llevo unos tacones de más o menos siete centímetros. Y sí, no me caigo, no sé como hago para estar en pie, rodeada de un arnés en una montaña. Esto es una cuesta, pero yo puedo con ella. Si hace falta, compro unas botas de montaña, me compro lo que haga falta, pero ya estoy aquí, y yo de esta cuerda no me suelto. La fortalezco con mis sonrisas. Es semejante a cuando te dicen de pequeño que si piensas en algo alegre puedes volar. Este camino es duro, y aunque a veces he tenido baches en la montaña, aquí sigo, firme y con mis tacones plateados. No me voy a manchar. Porque yo soy fuerte, y puedo hacer mucho más que no mancharme. A veces miro hacia arriba. El pico lo veo altísimo, pero puedo echar otra sonrisa más porque lo estoy consiguiendo. Eso me ayuda a ganar otro hilo más en mi cuerda, y confianza en mí misma. Estoy sorprendida, estoy escalando. No me gustan las montañas, al menos no para escalar. Pero si para dar un respiro a mi vida desde mis pulmones, y pensar en lo orgullosa que estoy de seguir viva, y sentir el corazón latir. Mi corazón no tiene marca pasos, pero si él es mi marca pasos en la vida. Hoy me levanto con el pie derecho. Hoy, y lo intentaré hacer siempre. Más vale perder y haberlo intentado, que no perder y no haber hecho nada. Gracias a todos los que me rodean. Gracias a todos los que me ayudan.

En especial, a una persona que me hace abrir los ojos, a pesar de tantas legañas que tengo, que ni apenas me deja mirar. Gracias.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Y me canso de nuevo.

Y aquí estoy. Yo ya me canso. Hasta ahora saqué la fuerza de un sitio imposible. He querido viajar y viajar con mi maleta sucia de la mano, en busca de algun lugar donde tengan valentía a la venta. Que alguien me diga que tren exacto lleva al mundo, donde allí se puedan cumplir los sueños sin temor ninguno. Que alguien me diga como puedo conseguir cargando con tanto peso sobre mi espalda, pues me está haciendo daño en cada una de mis pequeñas vertebras de hueso. Pensando todo esto, sé que no sirve de algo, nada de esto me ayuda. Sigo estando cansada de todo. El tiempo fluye, y yo no hago más que perderlo. Fluye por el aire como el propio oxígeno que tomamos, incluso diría que está mezclado. El tiempo es todo lo que tengo por ahora. No me queda nada más. Hay tantas cosas en la vida... Caminos por crear, por recorrer, ya sea con compañía o sin ella... Hay tantas decisiones que tomar, y tantas opiniones que escuchar, y ahí mismo saber si es necesario estar ofendido o halagado... De solo pensarlo, hasta se me acaba el aliento. Me queda mucho por aprender, y se termina el tiempo... Todo de agota. Hace meses que carezco de paciencia, incluso años. Esto es como estar dentro de una caja. No tienes luz, no tienes nada, tampoco tiene sentido. No tengo esperanza alguna. Siempre es la misma historia. Hay días en los que no quiero ni levantarme, quiero despertar, ¡¡¡pero de esta pesadilla!!! Estoy más cansada aún. Estoy cansada de estar atada a algo invisible, o yo que sé, no sé ni lo que puede ser. No puedo hacer nada que me guste, hay tantas cosas que me impiden tener una vida normal.. Estoy cansada de no poder llevar un día a día bien. Quiero que llegue el día en que no tenga preocupaciones, quiero aprender a vivir como Dios manda, y quiero ser feliz siempre. Estoy cansada de que mi felicidad sea tan pasajera. De las que cojen un tren, se marchan, ni te despides de ella, y después vuelve porque quiere estar aquí, conmigo. Estoy tan cansada de todo esto... Y ya no sé lo que tengo que hacer en esta vida para sentir que nada me perjudique. Quiero ver que la vida no es dura. ¿Para qué demonios nos han creado?, ¿para estar así?. Vale que nos caigamos por culpa de baches a lo largo de los años para aprender que no es lo más duro que hay, pero creo que no somos muñecos. Somos humanos, tampoco objetos. Tenemos sentimiendos, no un frío corazón. ¿Por qué hay gente con agorafobia? No sé como dominar todo esto, y coger al toro por los cuernos. Pero lo que sí sé, es que estoy muy cansada ya de todo esto.