Un pedacito de mi se va en recuerdo de todas estas personas que me han hecho sonreír cuando yo he estado enferma. En este juego de rol he conocido a personas maravillosas. Unos más buenos que otros, pero a todos les he cogido un gran cariño especial. Este juego me ha devuelto la vida, cuando yo estaba mal por problemas personales y por la agorafobia y fobia social, ellos me han extendido frente a mi una mano honrada y impecable de falsedad, de la cual yo me aferré tanto que ahora se me hace imposible olvidarles. He vivido muchos momentos increíbles evadiendome de las malas cosas que rodeaban mi vida. Y muchos de ellos me han sabido demostrar cual es el significado de un verdadero amigo. Echo muchísimo de menos esa etapa en la que reía con ellos, y no importaba lo demás. Desgraciadamente, todo eso ya ha pasado, pero ahora mismo estoy muy orgullosa de haberlos conocido. Desde aquí doy las gracias a cada persona de esa hermandad, una hermandad como ninguna otra, por haberme apoyado como lo han hecho, y por haberme hecho sentir persona, como no me sentí en tanto tiempo. Ahora brindo por toda esa seguridad que me dieron, y por el tiempo que han empleado en mi. Porque Hijos de Esparta ha sido el mejor comienzo que he tenido en mi vida, para hacer borrón y cuenta nueva. Después de toda esa gran temporada, me llevé muy buenos recuerdos, dos de ellos son dos de las personas que más quiero en este mundo: mi pareja sentimental Alejandro y por supuesto, mi mejor amigo Juan, que es el único que me ha sabido demostrar que es un espartano hecho y derecho.
Por estos recuerdos que me quedan, los seguiré reviviendo dentro de mi una vez más. :)
Saludos.


No hay comentarios:
Publicar un comentario